La decisión de la alcaldesa capitalina Roxana Méndez de modificar el Decreto Ejecutivo No. 1899, conocido como la “ley zanahoria”, es calificada como un “retroceso” en materia de seguridad pública.
Esa es al menos la opinión del abogado Miguel Antonio Bernal. “Me parece muy vergonzoso que se proceda como ella [Méndez] lo anuncia porque es un secreto a voces que es por instrucciones del señor presidente de la República [Ricardo Martinelli], interesado en el tema por sus supermercados”.
Bernal señaló a Prensa.com que es un “flaco favor” el que se le hace a la población, porque quienes deberían predicar con el ejemplo lo que hacen es convertirse en cómplices.
Añadió que la regulación sobre la venta de licor debe tomarse como "algo verdaderamente serio", por lo que sugirió la creación de una ley que no se puede modificar de acuerdo con determinados intereses.
Por otro lado, Gabriel Diez, presidente del Consejo Nacional de la Empresa Privada, expresó que “si el decreto era para que la gente dejara de tomar licor después de las 3:00 a.m., entonces qué vamos a hacer [con el cambio]… para eso que quiten el decreto”.
Y aunque reconoce que no se deben perjudicar a los hoteles o restaurantes, Diez indicó que “el problema está en que se hacen decretos armados para ciertas cosas... debe ser para todos o ninguno”.
Ambos coincidieron en que la modificación a la "ley zanahoria" podría repercutir en el incremento de las cifras de ludópatas, el alcoholismo, los accidentes de tránsito, violencia intrafamiliar, entre otros.
Ayer, lunes, la Alcaldía de Panamá confirmó que a solicitud de supermercados, hoteles y abarroterías modificará el Decreto No. 1899 del 18 de noviembre de 2011 que prohíbe la venta de licor a partir de las 3:00 a.m. en estos locales. “El decreto estaba en proceso de revisión porque los supermercados nos lo han estado solicitando, también las abarroterías y hoteles”, explicó la alcaldesa Méndez.